En este entorno festivo, donde una multitud de jóvenes se reúne anualmente para disfrutar de la música en vivo, instax ha sabido aprovechar la ocasión para estrechar lazos con su audiencia y fomentar la interacción con ella de maneras creativas e inolvidables.
Uno de los elementos que indiscutiblemente capturó la atención de los asistentes fue la tan esperada y emblemática piscina de bolas de instax. En este espacio, se tomaban fotos de los visitantes mientras se lanzaban a la piscina, capturando de este modo sus expresiones más auténticas y los momentos más espontáneos y divertidos del festival.
Pero la propuesta de instax no se detuvo ahí, ya que, mientras los visitantes esperaban su turno para saltar a la piscina de bolas, también se les brindó la oportunidad de participar en un emocionante sorteo.
Instax añadió un toque adicional de personalización a la experiencia mediante la introducción de su novedosa y creativa herramienta diseñada especialmente para eventos: Instax Biz. Cada una de las fotografías instax estaba enmarcada con la imagen gráfica distintiva del festival, lo que contribuyó a hacer que cada foto fuera aún más especial y única, de esta manera, los asistentes pudieron llevarse consigo un recuerdo físico y tangible que atesorarán para siempre y que les permitirá revivir los emocionantes momentos vividos en la piscina de bolas.